La fuerza de inseguridad de su estado

Vaya, vaya. Así que usted lo hizo sin saber. Bien es cierto que estas cosas pasan, aunque luego nunca se sabe a la larga si fue para bien o para mal.

Y dice que fue usted solo. Bueno, no le compadezco, si le digo la verdad, pero me resulta usted inquietante. No, no me malinterprete. Si usted hasta tiene cara de buena persona, no parece que haya roto un plato en su vida, pero sabiendo lo que ahora se sabe comprenda usted que no le vuelva a mirarle de igual manera.

Sí, sí. Comprendo que la situación era límite, pero tengo una curiosidad insana. En confianza, me avergüenza hacerlo, pero me siento en la obligación de preguntarle. Ya sabe usted que la curiosidad es un instinto casi tan incontrolable como el sexo. En fin, desde que me enteré de todo me he preguntado ¿de dónde sacó tanta fuerza?. No pretendo ofenderle, pero hasta el día de hoy le tenía a usted por una persona bastante pusilánime. Excúseme por mi apreciación, aunque comprenda que es debido a la estupefacción provocada por la realidad que ahora se ha descubierto ante mis ojos.

Presa fácil(mente perdida)

A ver si lo entiendo y perdone mi insistencia. ¿Todo fue por miedo? ¿por pánico? Eso fue lo que le dio la fuerza necesaria para realizar tan indigna proeza ¿cierto?. Podría decir que es apasionante contemplar cómo un animal acorralado es más temible que el más grande de los depredadores. Dicen que es pura química, que la adrenalina vence a la voluntad y al raciocinio en situaciones extremas, aunque no me niegue que, a toro pasado, la situación no era para tanto. Claro, fue una acumulación. Como una explosión ¿no?. Siempre hay momentos en los que tememos que el cielo va a caer sobre nuestras cabezas, el pavor nos domina y se nos junta con una mala noche de mil vueltas en la cama. Es comprensible, pero no excusable. Hágase cargo.

No hace falta que me diga nada. Sé apreciar cuando alguien está arrepentido. ¿Sabe? creo que todo es por nuestra educación católica. Siempre la moral nos ha servido más de obstáculo que de guía. Cuando descubrimos que todo lo que nos gusta o nos produce placer sensorial está censurado y mal visto por una moral tan castradora nos sentimos muy mal. Es pura inseguridad ¿sabe?. Pero, bueno, tampoco quiero ahora hablarle de mis teorías morales y filosóficas. La situación es límite y requiere que nos centremos. Como iba diciendo, creo que usted siente el arrepentimiento por lo que ha hecho, pero es evidente que no siente culpabilidad. Espere, espere. No me diga que es una contradicción. A usted le molesta y le avergüenza la manera en la que se han desarrollado los hechos, pero la intención originaria le sigue pareciendo justa, aunque yo mismo no llegue a comprender su lógica. Dígame, ¿usted ha sido así toda su vida y se ha guardado todo esto durante tanto tiempo? Claro, y ha tendo que salir todo a la luz precisamente así y precisamente aquí.

Vaya,vaya. Nunca dejará de sorpenderme mi capacidad de asombro y cómo me las ecuentro de frente y no las esquivo. Espero que se mejore y que le vaya bonito. Seguiré pendiente de su evolución.

Banda Sonora recomendada:
Precisamente así x Siniestro Total «Popular, democrático y científico » (2005).

4 respuestas a «La fuerza de inseguridad de su estado»

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